Dejo una reflexión sobre la rectificación del carácter personal y ajeno. Es un hecho que el carácter, en ocasiones, impide, dificulta y traba las relaciones personales.
Así que deseo que para 2017, todos, sujetemos, contengamos y reprimamos ese carácter insufrible -por áspero, desesperado y amarillo-que altera la fórmula química de la suavidad entendida como nada etérea.
Seamos felices bárbaros pero suaves.
» Todos aquellos que han sobrevivido
a tres naufragios, tienen asegurada
la inmortalidad.
Así se afirma al menos
en los nunca escritos códices
de Argónida.
Mi suerte ya está echada :
un naufragio me queda para atajar la muerte »
José Manuel Caballero Bonald.